Cerraban la competición de hockey línea de los WSG 2024, las selecciones absolutas masculinas tras un mes continuo de partidos y en las mismas instalaciones del Palaghiaccio Giuseppe Bolino de las anteriores categorías, siendo nada menos que 24 las selecciones inscritas, acudiendo todas, a la cita en Roccaraso, entre el lunes 16 y el domingo 22 de septiembre.
El lunes, con la toma de contacto de la pista y los primeros enfrentamientos por la tarde y a partir del jueves con los cruces directos y las finales el domingo.
Como en las otras categorías, la competición comenzaba dividida en cuatro grupos preliminares, con los dos mundialistas A y B de cuatro integrantes y los otros 16 países, divididos en esta categoría, en dos grupos, C y D, con ocho participantes, respectivamente.
que en el grupo A compitieran Eslovaquia, España, Italia y la R. Checa,
mientras que en el B lo hicieran Argentina, Francia, Taiwan y USA.
Por su parte, en el grupo C competían Australia, Bélgica, Brasil, Canadá, India, México, Polonia y Suecia
y los integrantes del grupo D eran Alemania, Chile, China, Colombia, Gran Bretaña, Japón, Namibia y Suiza.
Al igual que la competición junior los cruces directos comenzaban en octavos de final con los dieciséis mejores equipos; los ocho mundialistas y los cuatro primeros de los grupos C y D. Por lo que España estaba de entrada clasificada y al ser del grupo A, le tocaría un rival del grupo C. Y como siempre y dependiendo del avance de la competición, mejor ser primera, que segunda, que tercera o que cuarta por el mejor o peor nivel del rival del cruce y dependiendo siempre de la suerte, cruzándose primeros con cuartos y segundos contra terceros.
Los ganadores pasarían a cuartos de final, semifinales y final, enfrentándose los perdedores por las restantes posiciones.
Lo que no estaba tan claro era la distribución de los enfrentamientos en los grupos no mundialistas. Con ocho rivales pero tan solo dos partidos, imaginamos que por sorteo, el encaje de bolillos para lograrlo tuvo que resultar entretenido; así que por ejemplo, Namibia por arte de birlibilroque no se vería las caras con Japón o Gran Bretaña en su grupo, o que Suecia no se mediría en el suyo a Canadá.
En la magnífica pista de 30x60 y en jornadas interminables de más de 16 horas de hockey, se disputaron 76 partidos con escasa afición en general y con una aceptable retransmisión televisiva (con comentarios tan solo en los partidos italianos o de las finales).
Fase de grupos.
En el grupo A, era los españoles los encargados de estrenar la competición, haciéndolo frente a la vigente campeona del mundo.
R. Checa-España (3-0) con mucho respeto inicial entre los dos conjuntos, España controlaba el manejo del puck con los checos dejando hacer al intento de buscar su mejor oportunidad. Llegaba en forma de falta, mediada la parte, pero bien resuelta defensivamente por los españoles, no conseguía variar el marcador. De tal manera que sin apenas interrupciones y escasas oportunidades, finalizaba la primera mitad sin goles y siete disparos en cada portería.
Sería en la segunda mitad, cuando los checos se ponían las pilas e incrementaban su acoso. Fruto de ello y tras un tiempo muerto español llegaba su tanto de acción individual (1-0) min 13. La reacción española no se hacía esperar y pronto forzaban la primera falta checa. Pero el exceso de celo, y consumido un minuto de superioridad, provocaba una segunda falta española que abortaba la ocasión más clara de igualar. Superado el resto de inferioridad sin variación en el luminoso y con los checos jugando a la contra, el partido entraba en su tramo final con una nueva acción individual checa que inclinaba claramente el marcador a su favor (2-0) min 5. Un tercer tanto con España volcada en ataque (3-0) min 2, otorgaba los tres primeros puntos a la vigente campeona, ante cierta indiferencia española, pensando que lo peor ya había pasado y lo bueno estaba por llegar. Los porcentajes de tiro recibidos eran 0/16 y 3/24, respectivamente.
Comenzaba mal el combinado español, pero entraba dentro de lo asumible. Quedaban dos partidos más y se podía reconducir la situación.
En el segundo, tocaba enfrentarse a la selección anfitriona y por ello, con comentarios en directo, aunque en inglés.
España-Italia (2-5) los dos perdedores del día anterior se jugaban tres puntos trascendentales, pero más para los italianos, por tener a los más complicados checos como últimos rivales. Partido a cara de perro, Italia casi siempre se nos suele complicar, pero España comenzaba muy bien y controlando el juego, creaba buenas ocasiones. Una inoportuna falta española en el ecuador de la parte, posibilitaba a Italia a adelantarse y rompía un tanto el ritmo hispano. Ni una cosa ni otra, superada la sanción, España recomponía filas y en el tramo final, y con la primera falta italiana, se adelantaba de forma diferida (1d-0) min 4 para ajusticiar inmediatamente en acción individual (2-0) min 3 y llegar al descanso habiendo además desperdiciado una nueva falta contraria.
Con ventaja y partido encarrilado comenzaba la segunda mitad. O eso pensábamos, pues nada más empezar, un extraordinario tiro acercaba a los azzurri (2-1) min 19 y una segunda e innecesaria falta española les permitía igualar (2-2s) min 17, con mucho tiempo por delante. Jarro de agua fría para los nuestros que superados por la situación empiezan a perder los papeles y sin un tiempo muerto por medio, una doble falta concede su tercero (2-3ss) min 15 y en plena efervescencia italiana, el cuarto de gran jugada (2-4) min 12. ¡Cuatro goles en siete minutos! Por fin, con una nueva falta italiana, dos goles en contra y ocho minutos por jugar, llega el tiempo muerto intentando recomponer una situación límite. Y pasó lo que podía pasar ante una bien posicionada Italia. Correr de minutos sin variación en el marcador, sacar al portero en los últimos intentando aprovechar la ventaja y quinto gol italiano a puerta vacía sobre la bocina. Los porcentajes de tiros respectivos eran 4/15 y 2/18 con 5 faltas+10' para España y otras 5 para Italia. Los goles españoles los anotaban C. Cabrera y Gui. Jiménez.
Para el tercer partido tocaba Eslovaquia y los hispanos estaban condicionados a ganar. Primero por amor propio y segundo porque sabiendo el final del partido R. Checa-Italia (2-0), un buen resultado les metía en la ecuación del segundo puesto.
Por tanto en el España-Eslovaquia (4-1), salían los españoles con la lección aprendida, y la disposición del equipo al entrar a pista era otra. Una victoria por cinco goles o más daba de repente la segunda posición del grupo y el consiguiente cruce con los ingleses. Muy serios y conjuntados, esta versión española era diferente y con claras ocasiones el primer gol llegaba mediado el ecuador de la parte de un gran disparo (1-0) min 9. Hasta el descanso y a pesar de las grandes oportunidades que España dispuso, el luminoso no variaba. Hasta entonces los significativos porcentajes de tiros recibidos era 0/2 y 1/13, respectivamente.
En la segunda mitad volvía España a redoblar esfuerzos y pronto anotaba un segundo gol de gran jugada (2-0) min 17. El inmediato tiempo muerto eslovaco intentaba frenar la mejor disposición española en pista, pero sin mucha eficacia. Con tiro al palo incluido, las situaciones a favor se repetían y no hacían prever que en la mitad de la parte, una acción individual eslovaca les volviera a meter en el partido (2-1) min 9. El inmediato cambio en la portería española (1 de 5), reactivaba las mustias filas españolas en busca de lo imposible y así dos nuevos tantos llegaban pronto y seguidos (3-1) min 6 y (4-1) min 5, en un autentico baño de autoestima. Y a punto de conseguirlo, llegaba el exceso de celo, las faltas y los innecesarios piques personales y ni aun sacando al portero, España lograba anotar un tanto más. Los porcentajes finales de tiros recibidos reflejan lo acontecido en la pista 1/9 y 4/27, respectivamente, anotando los goles españoles, J. Tomás, P. Mata, Gui. Jiménez y Go. Jiménez y los tres goles de diferencia sólo daban para ser terceros de grupo, teniendo que enfrentarse en octavos de final al primero del grupo C y no al segundo del grupo D, como hubiera sido preferible (aunque nunca se sabe).
Con los resultados producidos, la R. Checa, con tres victorias y 9 puntos aseguraba el primer puesto del grupo y por tanto el "rival más sencillo" en su cruce de octavos de final. El resto de selecciones, con tres puntos, quedaban encabezadas por italianos, españoles y eslovacos, en ese orden y por el average general, habiendo las tres perdido con la R. Checa y ganando un partido cada una con el resto.
En el grupo B la situación era muy parecida, con estadounidenses superiores a franceses, argentinos y taiwaneses, terminando primeros, al ganar sus tres enfrentamientos, con nueve puntos. Francia finalizaba segunda con 6, al ceder en el último partido contra USA y haber ganado previamente a los otros dos. Taiwan figuraba tercera al imponerse a Argentina y la albiceleste acababa cuarta y sin puntos, cediendo en sus tres compromisos.
De los grupos restantes, en el grupo C donde competían Australia, Bélgica, Brasil, Canadá, India, México, Polonia y Suecia y cada selección debía jugar tan sólo dos partidos, al termino del doble enfrentamiento y ocho partidos, cada uno de su madre, tan solo un país había ganado sus dos compromisos, Suecia, por lo que tenía 6 puntos; Australia había ganado uno y empatado otro, y tenía cuatro puntos y cuatro habían ganado uno, perdido el otro y figuraban con tres. Polonia había empatado uno y perdido el otro y figuraba penúltima con dos puntos e India cerraba la tabla sin puntos en su haber, al perder sus dos partidos. Muy igualado el grupo, detrás de Suecia y Australia también se clasificaban por average, en tercera y cuarta posición Canadá y Bélgica respectivamente, quedándose fuera de los cruces de octavos y con los mismos tres puntos Brasil y México.
En el grupo D con Alemania, Chile, China, Colombia, Gran Bretaña, Japón, Namibia y Suiza, la situación era idéntica en cuanto a sistema de competición, con mucha igualdad entre cinco de sus contendientes, en el que cualquier despiste te apeaba de los cruces y donde la diferencia de goles se convertía en trascendental. Así, ganaban sus dos partidos y lideraban el grupo con seis puntos Colombia, Gran Bretaña y Suiza, en ese orden de posiciones, por el average entre ellos y les acompañaba en el paso a octavos Namibia, con tres puntos por ganar un partido, los mismos que Alemania, que se quedaba fuera, por peor average. Sin puntos Japón, China y Chile, también continuarían la competición luchando por los últimos lugares de la clasificación general.
En los enfrentamientos de octavos de final a España como tercera clasificada del grupo A nos emparejaban con la primera del C, la selección sueca. Con viejos conocidos en las filas del equipo sueco
España-Suecia (2-3), el partido se presentaba complicado y muy igualado, y con mazazo inicial, al anotar Suecia en su primera ocasión (0-1) min 18. La reacción española, al contrario que en otras situaciones parecidas, fue excelente, encajando perfectamente el tanto y poniéndose a la labor de remontar enseguida. Pero enfrente una peligrosa y certera Suecia desarmaba las ansias españolas con un nuevo tanto a la contra (2-0) min 13. Con dos goles de diferencia la remontada se empezaba a complicar, pero los españoles no cejando en su intento reducían diferencia en el último tramo de parte (1-2) min 5. Habían conseguido volver a meterse en el partido con tiempo suficiente, pero nuevamente el exceso de celo llevaba a una innecesaria falta y tanto sueco antes del descanso (1-3s). A la segunda mitad salía España con cambio en su portería y las mismas ganas que en la primera, con el combinado sueco esperando sacar tajada de sus contras.
Mediada la parte una falta nórdica daba oportunidad al combinado español de recortar diferencia en superioridad (2s-3) min 10, y con tiempo por delante, el acoso español a la portería sueca, se quedaba en eso, acoso y Suecia, con una gran actuación bajo palos, accedía a cuartos, dejando con la miel en los labios a una España que quedaba eliminada del grupo mundial debiendo luchar por posiciones más retrasadas. Los goles españoles eran obra de H. Gargallo y D. Gutiérrez y los aclarativos porcentajes de tiros recibidos, 3/10 y 2/52, respectivamente.
El resto de emparejamientos eran
R. Checa-Bélgica (6-0) claro resultado para los checos ante una selección belga que aguantaba el primer cuarto de partido. Con cuatro goles al descanso, en la segunda mitad se relajaban un tanto, reservando fuerzas para siguientes compromisos.
Argentina-Colombia (1-0) partido muy igualado entre dos selecciones que se conocen muy bien y con victoria final muy ajustada para la albiceleste que supo aguantar su gol inicial (1-0) min 14, hasta la bocina final para pasar a cuartos ganando un solo partido y con un solo gol, máximo aprovechamientos.
Francia-Namibia (4-4b) resultaba un partido muy igualado que sólo se resolvería en el tiempo extra y con una primera mitad netamente namibia (0-3 al descanso) sabiendo aprovechar muy bien sus superioridades. En la segunda mitad la remontada francesa sorprendía un tanto a los africanos (2-3) min 11 y (4-4) min 3 que se veían abocados a la prorroga y donde conseguían rectificar (4-5) min 7, para pasar a cuartos con suspense.
Italia-Gran Bretaña (5-2), la superioridad italiana quedaba reflejada en el marcador, y los tres tantos iniciales italianos (3-0) min 13, marcarían el devenir del choque (5-1 al descanso). En la segunda, la agresividad defensiva británica penaba su posible remontada, teniendo que jugar muchos minutos en inferioridad.
Taiwán-Suiza (2-1), partido muy entretenido, pues Suiza se adelantaba de inicio (0-1) min 17 y aunque empataba enseguida Taipei, les condicionaba para el resto de partido. Con igualada a uno al descanso, Taiwan demostraba su superioridad en los minutos finales (2-1) min 4, logrando el pase a cuartos de final.
Eslovaquia-Canadá (1-3). Superiores los canadienses y yendo siempre por delante (0-1) min 16, una falta metía a Eslovaquia en el partido antes del descanso (1s-1) min 12, para en la segunda, repitiendo guion, se volviera a adelantar Canadá (1-2) min 17. Forzando la maquina Eslovaquia, en los minutos finales intentando empatar jugando sin portero, pagaba su atrevimiento con un tercer tanto en contra.
USA-Australia (5-0), partido sin complicaciones para los americanos, que sin querer hacer sangre, se imponían con claridad a los aussies, como indicaba el resultado (3-0) al descanso.
Por tanto las ocho selecciones que pasaban a cuartos eran 3 europeas, R. Checa, Italia y Suecia, 3 americanas, USA, Canadá y Argentina, una africana, Namibia y otra asiática, Taiwán. Perdían plaza mundialista España, Eslovaquia y Francia y la ganaban Suecia, Canadá y Namibia.
Los enfrentamientos de cuartos de final quedaban configurados de la siguiente manera
R. Checa-Argentina (10-0), con la selección checa merendándose a la argentina, (6-0) al descanso y cambio en la portería, para presentarse descansada en semis y con todos los merecimientos.
El duelo Suecia-Namibia (1-2) resultaba muy emocionante e igualado, recibiendo los de la triple corona la misma medicina que administraron a la española. Tras una primera mitad de mucho respeto y pocas oportunidades, llegaba el gol namibio a poco del descanso (0-1) min 4. En la segunda parte, la presión sueca daba sus frutos antes de su ecuador empatando (1-1) min 10, pero la respuesta africana era más sangrante (1-2) min 1, por el momento, sin tiempo de respuesta sueco, aun sacando al portero. Namibia se metía por primera vez en semifinales.
El Italia-Taiwán (2-1), era otro típico partido de cruces, con juego ralentizado en busca de las mejores ocasiones y sin cometer errores. Una falta por bando, sin rendimiento en el luminoso, derivaba en gol taiwanés en el tramo final de la primera parte (0-1) min 6, sorprendiendo a los italianos, que afortunadamente para ellos, reaccionaban al instante empatando de buena jugada (1-1) min 6. Una segunda falta china no variaba el marcador y la igualada en la segunda parte daba lugar a un minipartido y donde el acoso europeo daba sus frutos con un nuevo tanto a mitad de parte (2-1) min 10 y que sería ya inamovible dando el paso a semifinales a los anfitriones.
USA-Canadá (8-0) el enfrentamiento entre los vecinos norteamericanos, no daba lugar a equívocos y los de las Stars and Stripes dieron buena cuenta de los de la Maple Leaf (5-0 al descanso), sin demasiado estrés.
Para semifinales solo quedaban R. Checa, Namibia, Italia y Estados Unidos.
En el primer partido, R. Checa-Namibia (5-2), la selección checa se mostraba superior al combinado namibio y adelantándose (1-0) min 15 y pese a que Namibia empataba enseguida (1-1) min 13, los centroeuropeos se iban al descanso con ventaja (3s-1) min 1. En la segunda mitad controlaban el partido ahorrando energías para la final.
En la otra semifinal, USA Italia (5-2), los norteamericanos también se mostraban superiores a la selección anfitriona que se adelantaba en el marcador muy pronto (0-1) min 18. La reacción norteamericana no se hacia esperar, empatando en inferioridad y tomando la delantera enseguida (2-1) min 12. Con un nuevo tanto poco después (3-1) min 9, una falta americana propiciaba un tanto italiano antes del descanso en superioridad (3-2s) min 1. Y la situación al contrario, al inicio de la segunda (4s-2) min 17, dejaba las cosas en su sitio y ralentizaba un partido que siempre tuvo dueño, con el añadido de un último tanto, a puerta vacía, al casillero norteamericano (5-2).
Y a la gran final llegaban la dos mejores selecciones del campeonato. Las dos sin perder un partido hasta entonces, los checos llegaban con 31 goles a favor y 3 en contra mientras los estadounidenses anotaban 35 y encajaban 3 también.
R. Checa-USA (1-2). Combinados muy parejos, el que anotara primero tendría mucho camino hecho, dada la efectividad en porterias y para los que no vieran el partido era la R. Checa la que marcaba primero y muy pronto (1-0) min 18, condicionando esa premura el resto de partido, pues a partir de entonces se desentendieron de la defensa. USA, con margen de tiempo y bien plantada en la pista, elaboraba con tranquilidad sus jugadas y el árbol checo maduraba en el tramo final de la parte con un lejano disparo que se colaba como una exhalación para empatar el choque (1-1) min 7.
Con ese resultado al descanso y unos porcentajes de tiro parejos 1/14 por 1/12, en la segunda mitad se acentuaba el dominio de EEUU, esperando Chequia aprovechar alguna contra. La situación se les ponía de cara con la única falta del partido, que no sólo USA defendía a las mil maravillas, sino que en el posterior cambio de líneas ensayaba otro gran disparo (1-2) min 14, para terminar de atar el resultado. A partir de ahí, dormían el partido y el acoso final checo no llegaba a consumarse en gol, incluso jugando sin portero. 2/28 y 1/22, eran los porcentajes finales de tiros recibidos.
Merecido título para los americanos y una medalla de plata que les sabe a poco a los europeos.
El bronce se lo llevaba Italia al imponerse claramente a la selección africana Italia-Namibia (3-1), anotando primero y doblemente y con todos los goles en la primera mitad. En la segunda parte, jugando a favor de marcador, no tenían problema en contener los escasos ataques africanos, que se daban por satisfechos con lo logrado.
El quinto puesto fue para Taiwán que se impuso a Argentina 6ª (1-3) tras una primera parte sin goles y 7ª terminó Canadá al derrotar claramente a Suecia 8ª (5-1), en un partido en el que se adelantaron aguantando luego perfectamente el dominio territorial sueco.
Fuera de los cuartos de final y de las ocho posiciones mundialistas España quedaba englobada en las ocho siguientes junto a los otros perdedores disputando la
Copa Presidente comenzando con los cuatro iniciales cruces y donde tocaba medirse a una de nuestra bestias negras. Y este partido
España-Francia (2-2b) solo iba a ser diferente, en el entorno. Acostumbrados los dos equipos a más altas cotas, en esta ocasión luchaban por un noveno puesto. Igual de igualado que siempre y apenas sin interrupciones, el partido se iba al descanso cuando una falta española permitía adelantarse a los franceses en superioridad y llegar así al descanso (0-1s) min 5, pese a disfrutar España de la misma oportunidad. En la segunda mitad, una España especialmente lograba empatar de gran jugada mediada la parte (1-1) min 10 y tras superar una nueva falta. La agresiva respuesta francesa era sancionada y los españoles se ponían por delante en superioridad (2s-1) min 8. En la celebración la falta era para España y la oportunidad de empate para Francia (2-2s) min. De tal manera que se entraba en el terreno cenagoso de los últimos minutos con el partido sin decidir y los dos equipos no queriendo arriesgar en exceso, pensando en la prórroga. Y en el tiempo extra la efectividad gala se imponía (2-3) min 3, relegando a los españoles a las posiciones 13ª-16ª. Los porcentajes de tiro finales eran unos igualados 3/25 y 2/25 y los goles españoles obra de Gui. Jiménez y J. Tomás.
En los otros cruces los resultados eran Bélgica-Colombia (1-0), Gran Bretaña-Suiza (2-7) y Eslovaquia-Australia (3-1), por lo que colombianos, británicos y australianos acompañaban a España en la descafeinada lucha por la posición 13ª.
El primer cruce era con los cafeteros
España-Colombia (4-0) y los españoles solventaban con acierto el envite (2-0 al descanso) con goles de P. Mata, D. Díez y J. Tomás (2) y unos aclarativos porcentajes de tiro de 0/15 y 4/30.
En el partido para despedir el campeonato el duelo de los españoles era con los británicos.
España-G. Bretaña (1-0) muy temprano y en un partido sin apenas interrupciones, el monólogo español se traducía en un único gol, mediada la primera parte (1s-0) min 7, al aprovechar una falta. Los ingleses, sólo en los últimos dos minutos, mostraban algo de ambición y sacando al portero luchaban por remontar. El gol era de J. Tomás y los porcentajes respetivos de tiro 0/9 y 1/21, bastante explicativos.
De esta manera la decimotercera posición se la quedaban los españoles.